Un servidor o hosting es el lugar en el que está alojada tu web.
Es decir, se trata de un ordenador físico en el que está almacenado todo el contenido de la página. Cada vez que un usuario quiere acceder a tu web, su navegador se conecta con ese servidor y “se la descarga”.
Y aunque no lo sepas, el hosting también es un elemento que influye (y mucho) en su posicionamiento SEO.
¿Cómo exactamente? Pues eso es lo que vamos a ver.
Pero si quieres saber ya directamente cuál elegir, visita este artículo sobre los mejores hosting para Wordpress, y podrás tener un descuento de un 20% en el mejor hosting SEO de la historia (al menos de los muchos que hemos probado en 13 años).
Si todos estos conceptos te pillan de nuevas este post te vendrá muy bien para ponerte al día, porque aquí te explicamos:
Coge papel y boli que se viene una SEOclase de las importantes. 😉
Índice de contenidos del artículo:
Te lo explicamos de la siguiente manera.
Imagina que entras en dos tiendas distintas y le pides al dependiente que te saque un producto del almacén.
De las dos, en la primera tienda es mucho más probable que acabes comprando, mientras que en la segunda puede que incluso te hartes de esperar y te vayas por donde has venido.
Pues el servidor funciona de una manera parecida a ese dependiente.
En otras palabras:
El hosting que elijas afectará en gran medida a la velocidad de carga de tu web.
Esto es porque, como te decíamos, un usuario tiene que “descargarse” tu página para navegar por ella. Así que si el servidor tarda mucho en enviarle la información, tu web tardará más en cargar.
Y eso ya sabes que es muy negativo para el SEO.
Además, para rematarlo, si tu hosting es de baja calidad, la mitad de las veces que un usuario intente acceder se topará con un mensaje de error 500 o “servidor caído”.
Eso significa que la experiencia de usuario empeorará todavía más, lo cual es malo tanto para el SEO como para la conversión (así que consigues menos ventas).
No suena nada apetecible, ¿verdad?
Pues no te preocupes, porque si tienes en cuenta los consejos que vamos a darte para elegir tu hosting, a ti no te va a suceder lo mismo.
Lo primero que tienes que tener claro son los tipos de hosting que puedes contratar y cuál es mejor según tus necesidades concretas.
En general un hosting puede ser:
Ahora bien, también hay dos tipos de hosting que nosotros no te recomendamos jamás porque pueden ser perjudiciales para tu negocio:
Una vez tienes claro el tipo de hosting que te conviene más, lo siguiente es decidir qué plan contratar.
Una vez te has decantado por un servidor dedicado, virtual o compartido, lo siguiente es buscar un plan de hosting que incluya todas las prestaciones imprescindibles.
Vamos a ver cuáles son.
Los SSD son un tipo especial de disco duro. La diferencia con los normales es que la velocidad a la que transmiten datos es muchísimo más alta.
Y eso se traduce en que tu web cargará más rápido.
La mayoría de los servicios de hosting ya ofrecen discos SSD incluso en sus planes más básicos, pero es importante que lo tengas en cuenta.
Si hay un punto que diferencia una buena empresa de hosting de una mala o mediocre, ese es su servicio de atención al cliente.
Piensa que cuando tienes una web profesional pueden darse mil complicaciones:
Podríamos seguir así un rato, pero seguro que te haces a la idea.
Ojo, que no pretendemos meterte miedo. Pero la realidad es que a veces los problemas técnicos son inevitables.
Y un problema técnico en tu web son clientes que estás perdiendo.
De ahí que hagamos tanto hincapié en que cuando elijas una empresa de hosting te asegures de que ofrezca un buen servicio de soporte, que respondan rápido y que, a ser posible, atiendan las 24 horas.
Así dormirás más tranquilo. 😉
El instalador automático no es algo necesario. Es una herramienta que ofrecen la mayoría de los servicios de hosting. Básicamente te permite hacer todas las configuraciones esenciales de la web (crear la base de datos, instalar el CMS) con un solo clic.
Si no tienes ningún conocimiento sobre cómo instalar un CMS, como mínimo, el plan que elijas debería incluir la instalación automática de WordPress.
¿Por qué de WordPress específicamente?
Sencillo: porque es el CMS mejor optimizado para el SEO (como te explicamos aquí).
Lo normal es que esta función la encuentres en casi cualquier plan, así que pasamos al siguiente punto.
El certificado SSL es un protocolo de seguridad que protege los datos de tus clientes (datos personales, bancarios, etc.) frente a los hackers.
Podrías pensar que esto no es importante porque en tu web no manejas información sensible… y en parte tendrías razón.
El problema es que si no tienes este certificado SSL instalado, cada vez que un usuario intente acceder le aparecerá el aviso de “Esta web no es segura”. Y es muy posible que eso le genere desconfianza y se vaya sin entrar.
Así que mejor si te evitas problemas y buscas un plan de hosting que lo incluya. 😉 Los certificados SSL Let’s Encrypt son gratuitos y son suficientes.
Ten en cuenta que si tu web no es nueva y antes ha estado funcionando sin SSL, para que el SEO no se vea afectado hay que hacer una migración de HTTP a HTTPS, de esta forma podremos decirle a Google el cambio que hemos realizado, y no habrá problemas con el SEO.
Esto no es fundamental, pero sí es interesante que lo tengas presente.
Decíamos antes que los datos de tu web viajan desde el servidor en el que está alojada hasta el navegador del usuario.
Entonces, si el servidor y el navegador están en países distintos, esta velocidad de carga se reduce.
¿Mucho?
Pues lo normal es que no. De hecho la diferencia entre que tu web esté alojada en España o en Alemania, por ejemplo, es casi inapreciable.
Pero si estás dudando entre dos servicios de hosting con prestaciones muy parecidas y solo uno de ellos está en tu país, esto te puede ayudar a decantarte por uno (además así te aseguras de que dan soporte en tu idioma).
Este punto suele generar bastantes dudas.
Muchas personas piensan que un servidor que les ofrezca 10 GB de almacenamiento es más recomendable que otro con 5 GB, y acaban pagando por un espacio que luego no utilizan.
En realidad para la mayoría de las páginas es más que suficiente con tener entre 1 y 5 GB de almacenamiento.
La única excepción es que tengas una web con cientos de páginas y/o un montón de imágenes y vídeos de gran calidad (que son los elementos que más pesan), como podría suceder en un e-commerce.
Salvo esos casos, y siempre que te acuerdes de optimizar las imágenes que subes, el almacenamiento de tu servidor no debería preocuparte demasiado.
Pero eso es solo el principio.
Además es importante que tu web tenga un diseño que potencie la conversión, que esté optimizada para el SEO y que tenga una estrategia SEO, y una estrategia de contenidos detrás que te ayude a llevarle toneladas de tráfico.
Y con todo eso (además de con lo de escoger el hosting, ya que si trabajas con nosotros no tendrás que preocuparte por el hosting, tendrás el mejor hosting al trabajar con nosotros y está incluido en el precio) podemos echarte una mano. 😉
Ten en cuenta que nosotros estamos especializados en diseño web SEO, así que conocemos bien los factores más importantes para que una web haga buenas migas con Google.
Si quieres que nos pongamos manos a la obra con la tuya, solo tienes que hacer clic aquí y contarnos tu caso.
Lo de hacer que tu página corone los resultados de búsqueda es nuestra especialidad.
📕 Nuestro libro, editado por Planeta: "Posiciónate Tú Primero" Ya a la venta
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.
Esta web utiliza Google Analytics para recopilar información anónima tal como el número de visitantes del sitio, o las páginas más populares.
Dejar esta cookie activa nos permite mejorar nuestra web.
¡Por favor, activa primero las cookies estrictamente necesarias para que podamos guardar tus preferencias!
