Seguramente llevas tiempo dándole vueltas y lo tienes claro: quieres emprender.
Pero la idea te da muchísimo vértigo porque… si con tus hijos apenas tienes tiempo libre, ¿cómo vas a compaginarlo con un negocio?
En ese caso, tenemos algo que decirte: sí, sí que es posible.
Nosotros llevamos nuestra propia empresa y tenemos dos hijos con los que pasamos mucho tiempo de calidad.
Y no ha sido un camino fácil, para qué te vamos a engañar. Pero tras unos cuantos años de experiencia conciliando, hemos desarrollado unos cuantos trucos que nos han permitido hacerlo posible.
Trucos que te vamos a contar en este post.
“Ana, Fran, pero vosotros sois dos… ¿Vuestros consejos me van a servir a mí, que quiero emprender sola?”
Claro que sí.
Nosotros te hablamos en plural porque hemos emprendido y criado a nuestros hijos juntos, por eso estamos aquí contándote nuestra experiencia compartida.
Pero aunque tú no vayas a emprender con tu pareja, estas recomendaciones te van a ser igualmente útiles.
¿Lista?
Empezamos en 3, 2, 1…
Índice de contenidos del artículo:
✅ [Cómo ser mamá emprendedora] 6 consejos para llevar adelante tu negocio y tu familia sin sentirte sobrepasada
Seguro que, cuando compartes con otros tu idea de emprender teniendo hijos, muchos se llevan las manos a la cabeza.
Te dirán que es una combinación imposible.
Que tus hijos requieren toda tu atención y que no vas a poder llevar tu negocio a la vez.
Lo sabemos bien, porque nosotros también vivimos reacciones parecidas… y por suerte, no les hicimos ni caso. 😉
¿Y sabes qué hemos descubierto?
Que no solo es posible emprender siendo mamá (o papá)… sino que incluso es una manera de disfrutar aún más junto a tus hijos.
Y es que, con la estrategia adecuada, vas a poder pasar más tiempo con ellos que trabajando por cuenta ajena.
Vamos a ver cómo.
👉 1. Montar un negocio online, el «camino fácil» para conciliar
Tener un negocio que funcione a través de Internet te facilita mucho las cosas a la hora de cuidar de tus hijos, porque te permite:
- Trabajar desde casa.
- Organizarte tus horarios con libertad.
- Pasar más tiempo de calidad junto a ellos.
Lo mejor es que, con el boom de la digitalización, están surgiendo un montón de perfiles nuevos relacionados con el mundo online.
Esto hace que sea más fácil encontrar una profesión que tenga demanda y que encaje con lo que tú buscas.
NOTA: si necesitas ideas, al final del post te hablamos de una profesión con mucho potencial para montar tu propio negocio online.
👉 2. Emprende poco a poco
Si tienes la posibilidad, lo mejor es que te lances mientras mantienes tu actual trabajo.
Hay dos motivos:
- Disminuyes los riesgos (si te va mal, seguirás teniendo tu sueldo como respaldo), algo muy valioso cuando tienes responsabilidades familiares.
- Te vas habituando poco a poco al nuevo ritmo de emprender y conciliar.
Entonces, ¿cómo puedes llevarlo a cabo?
- Empieza en tu tiempo libre: aprovecha las tardes o los fines de semana para dar los primeros pasos en tu negocio y empezar a conseguir clientes.
- Negocia una reducción de jornada: una vez tengas un flujo estable de clientes, pide media jornada para poder invertir más tiempo en tu negocio y seguir creciendo.
- Solicita una excedencia: cuando ya no seas capaz de compaginarlo todo y tu proyecto requiera toda tu dedicación, pide una excedencia; en este tiempo compruebas si tu negocio marcha bien si lo disfrutas. Y, si no, podrás volver a tu trabajo.
De esta forma, te quitas de encima algunos de los miedos que te pueden frenar a la hora de emprender.
👉 3. Organízate para ser productiva
Cuando eres madre, tienes que aprender a exprimir cada segundo que tengas libre para dedicar a tu negocio.
Es decir: productividad al 250 %.
Algunas recomendaciones son:
- Asigna un lugar de la casa para trabajar: lo ideal es que tengas un despacho propio. Si no puedes, al menos instala tu escritorio en un rincón de la casa lo más aislado posible del resto (puedes utilizar incluso un biombo para lograr una separación visual).
- Adáptate a los horarios de tus hijos: aprovecha cuando ellos están en el colegio o la guardería para hacer las tareas que requieren toda tu concentración; y cuando estén por casa, te puedes dedicar a responder emails, comentarios de redes…
- Planifica tu jornada con antelación: dedica unos minutos cada noche a organizarte el siguiente día. Así, cuando empieces, te podrás poner a trabajar directamente y aprovecharás mucho mejor el tiempo.
- Mide cuánto tardas en terminar cada tarea: así podrás planificarte mejor. Además, te permitirá identificar qué tareas te llevan más tiempo y buscar formas de hacerlas más deprisa (porque cuanto menos tardes en completar el mismo trabajo, más rentable serás…).
Y un último consejo: ante todo, sé flexible.
Puede parecer una contradicción, pero lo que queremos decir es que no te obsesiones si algo de tu día no sale como planeaste.
Hay veces que estás más ocupada, que ocurren imprevistos, o simplemente que se te atasca una tarea y terminarla te lleva más de lo que esperabas.
En estos casos aplica las tres R’s: Respirar, Relajarte, Replanificar.
Y a seguir trabajando. 😉
👉 4. Pide ayuda a tu familia
Da igual lo bien que te organices, habrá momentos en los que necesites ayuda.
Por eso es buena idea que hables con tu familia y les expliques que a partir de ahora vas a necesitar que te echen una mano.
A lo mejor tus padres pueden quedarse un par de tardes con tus hijos, o tu pareja puede asumir una parte más importante de las tareas domésticas de forma temporal.
Y ojo: nada de sentirte culpable por tener que depender de tu entorno.
Empezar un negocio implica dedicarle muchas horas. Con el tiempo, acabarás encontrando el equilibrio y conciliar te será mucho más fácil.
👉 5. Delega en tu negocio en cuanto puedas
Ya te decíamos antes que el tiempo que dedicas a tu proyecto es muy valioso.
Por eso es una tontería desperdiciarlo en tareas que otros podrían hacer por ti, bien porque son sencillas o bien porque lo van a hacer más rápido (y mejor) que tú.
Estos son algunos profesionales en los que podrías delegar:
- Gestor: esto se da casi por hecho. Necesitas a alguien que te lleve todas las cuestiones administrativas y fiscales. Son temas importantes y es mejor dejarlos en manos de un experto para así evitar errores graves.
- Diseñador web: tener una web profesional es imprescindible. Puede que al principio te plantees hacerla tú misma porque irás justa de presupuesto, pero cuidado. Piensa que si contratas a un experto, además de ahorrar tiempo, podrás tener una web optimizada para el SEO y con un diseño profesional. Y esto te hará ganar más clientes. En definitiva, no es un gasto sino una inversión (y una de las rentables). 😉
- Asistente virtual: esta es una figura imprescindible en cuanto empiezas a tener varios clientes. Puedes contratar un asistente unas horas al día para que se encargue de llevarte la agenda, de responder emails y tener al día las facturas.
- Community manager: si ves que las redes sociales te sobrepasan y cada dos por tres te olvidas de publicar o de responder comentarios, es mejor delegar esto, aunque sea unas horas a la semana.
Delegar estas y otras tareas no solo te permitirá aprovechar mejor el tiempo (ya sea para trabajar o para dedicárselo a tus hijos).
También tendrás la tranquilidad de contar con colaboradores de confianza que te ayudarán a hacer crecer tu negocio.
👉 6. Ten un ritual de desconexión
Una vez terminas tu jornada, es importante que tengas estrategias que te ayuden a pasar del «modo trabajo» al «modo mamá».
Esto es lo que llamamos rutinas o «rituales» de desconexión.
Ese ritual puede ser:
- Salir a pasear.
- Ponerte a jugar con tus hijos.
- Hacer ejercicio.
- Etc.
Cualquier actividad que te haga cambiar el chip mental.
Esto te ayudará a no seguir dándole vueltas al trabajo mientras estás viendo la tele con tus hijos, jugando con ellos…
✅ ¿Quieres ser una mamá emprendedora pero no sabes a qué profesión dedicarte?
Te decíamos antes que, para nosotros, emprender online es la mejor forma de dirigir tu negocio y poder pasar tiempo de calidad con tus hijos.
Y también que hay muchas profesiones digitales nuevas que pueden ser una buena oportunidad.
Pero de entre todas ellas… ¿cuál elegir?
Para ponértelo más fácil, nos gustaría darte una idea: convertirte en Optimizer Manager.
El Optimizer Manager diseña estrategias de captación de clientes con Google.
Y además de ser una profesión digital que puedes ejercer desde casa, también tiene todas estas ventajas:
- Ofrece servicios de high ticket: el Optimizer Manager consigue resultados tangibles (más ventas para sus clientes) y por eso puede cobrar tarifas altas.
- Genera ingresos recurrentes: porque no solo diseña la estrategia, sino que la optimiza para que sea cada vez más rentable, un servicio por el que cobra mes a mes.
- Trabaja con un sistema validado: el Método #TúPrimero®, que nosotros llevamos más de 14 años utilizando con éxito con nuestros propios clientes.
- Puedes aprenderla desde cero: el Método #TúPrimero® es un sistema paso a paso, que puedes aprender incluso si ahora mismo no sabes nada de SEO ni de estrategias digitales.
Si quieres saber más sobre este perfil, tenemos una buena noticia para ti.
Y es que el próximo 28 de febrero empezamos la Semana #GánateLaVidaConGoogle, un entrenamiento 100 % gratuito en el que te explicamos cómo trabaja un Optimizer Manager y por qué tiene tantas ventajas para emprender.
Aún estás a tiempo de reservar tu plaza a través de este enlace.
Además, si tienes preguntas sobre cómo conciliar, nos las podrás plantear en los directos que haremos y te responderemos encantados.
¡Nos vemos muy pronto!