Desarrolla la identidad de marca de tu PyME paso a paso
Desde Tu Posicionamiento Web hemos dicho en diversas ocasiones que estamos a tu servicio, que lo que nos importa en realidad es conseguir que vuestra empresa funcione, que se asiente, que crezca, que sea un referente en vuestro sector. Y para eso una de las cosas más importantes que puede tener una empresa, es un buen trabajo de identidad de marca.
Así que vamos a ello, vamos por partes.
Lo primero que queremos es realizar un pequeño matiz o aclaración, los términos marca y logotipo (logo en su versión más abreviada) suelen ser utilizados habitualmente de forma indistinta, pero están muy lejos de ser lo mismo.
El logo es una parte de la identidad de marca, una parte importante, pero no toda la marca.
Un logo bien pensado, bien diseñado, bien utilizado en todos los soportes, es la base primordial de una marca, pero todavía quedan cosas por desarrollar y por utilizar.
Tened en cuenta que no estáis solos en vuestro sector, que hay muchas más empresas, que todas tienen su identidad y que hay que diferenciarse de los competidores.
Por tanto, desarrollar una identidad de marca diferenciada, llamativa, que represente las necesidades de los clientes a los que pretendéis dirigiros, es algo esencial para vuestro proyecto.
También debes proteger adecuadamente tu marca en internet, para ellos te dejamos este artículo que habla sobre cómo blindar tu marca.
Pongámonos a ello y respondámonos una serie de preguntas:
Índice de contenidos del artículo:
Una marca es una de las partes fundamentales de la identidad de una empresa, suele ser definida como el nombre de tu empresa, o el tipo de producto que se fabrica por dicha empresa, trascendiendo muchas veces al propio producto y generando un nombre general con el cual designar productos de similar categoría, como por ejemplo ha pasado con Danone, Tolines, Kleenex y otras marcas que han pasado a definir no sólo a su producto, sino en general a todos los productos de la misma categoría.
Lo que se ha venido en llamar identidad de marca y que tanto se utiliza en el mundo del marketing en general (y muy especialmente en el sector del marketing online), se construye sobre los mensajes que dicha marca emite, los valores que transmite, cómo influye (con qué mensajes) sobre las emociones de sus clientes o sus posibles clientes.
Resumiendo lo más posible, la identidad de marca de tu empresa es su personalidad, cómo es percibida, qué valores o conceptos son apreciados por los posibles consumidores.
Vamos a tratar ahora por qué lo que hemos planteado es importante para ti, para tu empresa, es decir:
Porque la marca, una identidad bien elaborada, representa a tu empresa siempre, transmite tus valores, tus ideas, a lo que aspiras, a tus productos, a tus trabajadores, tus servicios… todo. Una marca se respira, está viva, evoluciona. Y siempre tiene que hacerlo acorde a una estrategia.
Si tú no decides qué representa tu empresa, tu marca, otros lo decidirán por ti. Le adjudicarán unos valores, negativos para ti, y pueden generarte una crisis de identidad… Y de ahí puede resultarte difícil salir, porque suele ser un camino de no retorno.
Así pues, la siguiente pregunta que tenemos que hacernos si la identidad de marca es tan importante, sería:
El trabajo para conseguir que tu empresa, tu identidad, se convierta en una marca respetada, valorada y sobre todo conocida por tus posibles consumidores y tus competidores, tienes que saber que el camino es arduo y que conlleva muchísimo esfuerzo.
Así que vamos a ir paso a paso para que el trabajo de construir una identidad de marca no se nos complique más de la cuenta.
El primer paso que hay que dar para crear tu identidad de marca es hacer una investigación profunda, concienzuda. Para ello tienes que tener en cuenta lo siguiente. Tienes que tener clara quién va a ser tu audiencia, qué gustos tienen, qué valoran, por qué lo valoran. Esto no sólo es importante para la identidad de marca, es importante para tu empresa, para que sepas bien a quién quieres dirigirte, cómo hacerlo, qué aspiran, qué buscan y cómo lo hacen.
¿Qué hace que tu empresa sea especial, única, distinta? ¿Qué puedes ofrecer que no ofrezca nadie más? Saber qué puedes aportar, qué diferencia ofreces, qué valor añadido puedes darle a tus productos es lo que te va a hacer destacar por encima de la competencia.
Necesitas tener clara cuál es la estrategia de tu empresa, cuál es tu misión, algo que describa de forma sencilla los objetivos que persigues y la visión que tienes de tu marca. Porque sin tener claros estos objetivos, el propósito de tu empresa y de tu estrategia, es muy difícil que tu empresa avance, y es muy difícil que tu marca represente esta misión, esta visión de futuro.
¿Sabías que una marca de una empresa también tiene personalidad? Así es, un tipo de letra específico, unos colores, una serie de imágenes concretas, todo ello le imprime personalidad a tu marca, refleja unas aspiraciones. Asegúrate siempre que tu estrategia de marketing, de marca (en inglés «branding») representa a tu empresa.
Realizar un análisis DAFO nunca está de más.
Observar Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades para tu marca, para tu empresa, para tu estrategia. De esta manera se puede prever todo. Y estar preparado para todo lo que puede pasar.
¿Sabes o conoces ya a tu empresa en profundidad? Pues es hora de darle vida a la identidad de tu marca. Así que vamos con los pasos necesarios para ello:
Logotipo:
Lo primero, el Logotipo, aunque como hemos dicho al principio no cabe confundir Logotipo con Marca, y no representa la totalidad de la misma. Se trata de una de las piezas básicas o más importantes, posiblemente de las más reconocibles de tu marca. Tu logo va a estar en los sitios más reconocibles para tu marca…
Estará en tu web, estará en las tarjetas de visita, en las firmas de los emails, en los anuncios de publicidad físicos u online, será tu imagen en las redes sociales, en cualquier lugar donde tengas presencia… Por eso tiene que tener solidez, coherencia y tiene que ser coherente en todos los aspectos.
Tu Marca tiene que ser Interesante:
El Logotipo, como decíamos arriba, es fundamental para tu marca, pero no sólo, tus productos, la presentación de los mismos, la forma en que cuentas o relatas los servicios que prestas, toda acción que lleves a cabo tiene que ser acorde a ese interés que generas o que pretendes generar.
Color y tipos (de letra):
Saber qué variedad de colores puedes utilizar en todos los soportes, elegirlos bien, tenerlos a mano, hacer diversas aplicaciones para tener combinaciones… proporciona una variedad interesante para poder utilizar estas variedades siempre siendo fiel a la identidad de la marca que estás diseñando.
Los tipos (comúnmente conocido como tipografía) bien utilizados sirven para la fácil identificación de tu marca, de tus eslóganes, de tus productos, de las presentaciones que realices. Pero puede ser un arma peligrosa si no tenemos claro cuáles utilizar, hacemos una ensalada tipográfica, utilizamos el primero que se nos ocurra o elegimos mal el que debería representarnos. Entre los tipos, el logo, la imagen, los colores, tiene que haber coherencia, de no haberla, fallará la imagen que proyectas, y lo que buscamos con ella.
Redacta una Guía de Estilo, un Manual de Branding:
Impídete a ti mismo equivocarte, impide a otros en tu empresa hacerlo, consigue que quienes te ayuden a desarrollar la imagen de tu empresa o los trabajos online o similares relacionados con tu web o tus redes sociales no equivoquen o generen dudas sobre tu imagen corporativa, que no haya posibles errores. Porque de dicha coherencia, de dicho trabajo en común, depende que tu empresa sea percibida como profesional.
Diseñada la marca, estipulada su identidad y cómo utilizarla. Ahora queda integrarla en todas las facetas de tu empresa:
Lenguaje:
El lenguaje que utilices, la forma de redactarlo de contestar, de lanzar eslóganes, todo, tiene que estar pensado para reflejar la personalidad de tu marca. Si quieres reflejar sofisticación o profesionalidad, utiliza ese tipo de conversación más profesional. Si quieres algo más conversacional, más relajado, adopta este tipo de lenguaje.
Todo lo que no vaya acorde a tu imagen de marca, chirriará, y entonces es posible que los usuarios lo noten.
Conecta, consigue emocionar:
Sin relato no hay historia, no hay emoción, no hay adhesión… Es necesario que se hilvane una historia que emocione, que guste… Porque a las personas siempre nos ha encantado contar historias y que nos las cuenten.
Invierte en Marketing y Publicidad:
Sin ella los posibles consumidores no te conocerán, analiza los soportes, dónde hacerla, cómo hacerla, dónde están tus posibles consumidores, costes de captación de contactos, etc… De esta manera elegirás la mejor publicidad posible para tu marca.
Redes sociales:
Utiliza las redes sociales como amplificador de tu marca, para tu web, para tus conversiones, para conversar, como canal de atención al cliente, pre y post venta… elige las mejores, las más adecuadas para tu tipo de cliente.
Trabajar tu marca no es un camino recto, iluminado, sin tropiezos… Para nada. En cualquier momento puede torcerse, así que ¿como solucionarlo?
Como todo en el mundo del marketing, hay que lanzar y analizar, hay que observar y apuntar, hay que prepararse, hay que aprender, hay que cambiar en caso de que sea necesario. Y eso se hace con una monitorización constante, para no perder el control de la marca, para no dejar que todo el trabajo de preparación y desarrollo de identidad de marca se pierda por el camino.
Si estás buscando lanzar tu imagen corporativa, si estás buscando asesoramiento, si quieres que te ayudemos, sólo tienes que ponerte en contacto con nosotros aquí. Déjanos tus datos y nosotros te contactaremos.
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